En marzo de 1828 se averiguó que el lúpulo, hombrecillo o hublón, flor indispensable para la fabricación de la cerveza , se criaba espontáneamente, aunque en corta cantidad, en las cercanías del canal de Manzanares y soto de Migas calientes, y con más abundancia en los alrededores de Guadalajara y la Alcarria; siendo su coste una cuarta parte de la que se traía del extranjero, y su calidad la mejor a juicio de los fabricantes.
Manual de Madrid. Descripción de la Corte y de la Villa
Imp. de M. de Burgos, 1833.
Ramón de Mesonero Romanos
miércoles, 11 de agosto de 2010
Manual de Madrid
Etiquetas: literatura
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2 comentarios:
Muy curioso, Andrés. Lo que quiere decir que en España en 1828 ya se fabricaba cerveza a una escala importante (ya que se importaba lúpulo) mucho antes de que se establecieran las que se dicen "primeras cerveceras" del país.
un saludo.
Si señor, la actividad de elaborar cerveza no se dejó de realizar en la península, solo que se hacia en pequeña escala, pequeñas fábricas locales. El fenómeno de las grandes cerveceras llegaría casi un siglo después.
Salud, Andrés.
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